
tl;dr 1.5/10
Hay lugares que se sienten conocidos incluso antes de visitarlos. Las redes lo retratan como una taquería con calidad, de propuesta amplia y bien ejecutada. Habiendo sido bombardeado por recomendaciones en TikTok, llevaba ya varias semanas queriendo ir. Por fin me hice tiempo.
El espacio es cómodo, más cercano a un restaurante de tacos que a una taquería tradicional. El menú es amplio: preparaciones al vapor, al carbón, y plancha. Una carta pensada para complacer distintos antojos, lo cual no siempre juega a favor.
Visualmente, nada destacaba, y bastaron los primeros bocados para notar una constante: los tacos carecen de jugosidad y profundidad de sabor.
La tripa fue el primer tropiezo: preparada de forma dispareja, mitad dorada, mitad chiclosa, sin un perfil definido y, sinceramente, difícil de comer. Del carbón pedí ribeye y picaña, cortes que por naturaleza deberían aportar grasa y sabor. En ambos casos, la carne llegó seca, sin el ahumado ni la textura que esperas en un taco de este tipo. Las tortillas, que prometían ser recién hechas, aunque con marcas de comal, recuerdan más a una tortilla industrial que a una hecha a mano: textura plana y poca calidad.
El suadero, un taco que suele ser garantía por su simplicidad, llegó con sabor a grasa y una textura poco agradable. No tenía ni el tiempo ni el fuego necesarios. Del pastor no puedo decir mucho: no había trompo visible, y aun así lo pedí. Error mío.
Las salsas, aunque variadas, no terminaban de cumplir ni en picor ni en sabor.
Ningún taco fue incomible, pero todos quedaron muy cerca de serlo: por debajo del estándar que uno esperaría para un lugar con tanta visibilidad.
En el otro extremo, la atención fue excelente. El personal es amable, atento y servicial, lo cual hizo más llevadera la experiencia.
Para mí, fue uno de esos errores que te recuerdan que las redes sociales no son una brújula gastronómica, sino un espejo deformado de la realidad. Deja una sensación extraña: mucha forma, poca sustancia. Un recordatorio de que la visibilidad en redes no siempre está respaldada por el sabor.
Deja un comentario